Mostrar unas manos de aspecto saludable es tan importante como mostrar un rostro joven. Nuestras manos se exponen a diario a diversas agresiones que incluyen tanto la exposición al sol como los cambios de temperatura y el contacto con sustancias irritantes e higienizantes. Sin embargo, solemos retrasar el inicio de sus cuidados hasta el momento en el que empiezan a hacerse evidentes los signos del paso del tiempo, como pueden ser las arrugas en las manos o las manchas.
Como consecuencia, habitualmente a partir de los 40 es frecuente observar la presencia de lentigos y queratosis seborreicas, que son los tipos más frecuentes de manchas, en la piel del dorso de las manos.
https://youtu.be/EzLk–1Tqbs